Estoy leyendo "Cuando ya no estás" de Laura Vidal, especialista en duelo de nuestros animalitos de compañía, llevo más o menos la mitad del libro y ya he de decir que me ha llegado al corazón. Socialmente hay duelos que no son autorizados o no son validados, entre ellos el duelo por un animalito, eso es una pérdida añadida pues este tipo de pérdidas se vive tan solitario. Recuerdo en el 2008 que viví la pérdida de un perrito french poodle llamado "niño" al que amaba y adoraba con todo mi corazón, de pronto un día comenzó a tener ataques epilépticos, desde ese día que le ví tener el primer ataque sabía dentro de mí que nada volvería a ser igual y efectivamente, fueron siendo cada vez más fuertes y continuos hasta que el veterinario nos sugirió "dormirlo" para evitar que siguiera sufriendo. Sobra decir que se me partió el corazón esa tarde que tuvimos que dejarlo ir. Llegué a casa y en silencio, con la luz apagada comencé a llorar lágrimas amargas y solitarias.
Sólo quien ha amado a un animalito sabe lo que es vivir ese dolor, y nadie parece entenderlo "cómprate otro", "sólo era un perro", "ni que fuera una persona", con ganas de decirles que mejor no nos digan nada, preferible el silencio que esas palabras que duelen aparte. Pero uno que los ha amado debe respetar ese dolor, llora y elabora tu duelo, es una pérdida importante, ellos se convierten en nuestros mejores amigos, en nuestra familia, en nuestros confidentes. Si estás pasando por un duelo de algún animalito te recomiendo que leas este libro, es maravilloso y enfocado especialmente en el tema.