miércoles, 9 de diciembre de 2015

Para recordar en la frustración

Cuando las situaciones no salen del todo bien, o como tu quieres, y sientes que has perdido energía y tiempo, vale a veces la pena reflexionar si estamos en el camino correcto, ¿cuando seguir o cuando saber renunciar para continuar en favor de lo que uno quiere? Jorge Bucay en su libro "el camino de la felicidad" escribe: "La felicidad es, para mí, la satisfacción de saberse en el camino correcto. La felicidad es la tranquilidad interna de quien sabe hacia dónde dirige su vida, la felicidad es la certeza de no estar perdido".

Cuando el plan B se convierte en lo presente, bien valdría la pena reconsiderar lo que estamos haciendo, hasta convertirlo en lo que realmente queremos hacer: "El hecho de que no estés donde quieres estar debería ser motivación suficiente".

 

martes, 8 de diciembre de 2015

Sobre la tristeza en la época navideña

La navidad es una de las festividades en donde la gente expresa sentirse más feliz y otras más tristes. Gente va y viene preparándose para las diversas fiestas, posadas o cenas, sin embargo, hay personas a quienes les molesta y desagrada ésta época y es que en el pasado algún suceso ensombreció su estado de ánimo y su motivación respecto de la navidad, recuerdos difíciles hacen que algunas personas no disfruten ya no digamos de las fiestas, sino del presente en general.

Recordemos que las festividades y las "fechas especiales" han sido otorgadas por el hombre en afán de tener algo ya sea religioso, aniversarios, fechas nacionales, etc. Todo ha sido creado, los números, los días, la edad misma. Cuando nos duele una fecha, un dia en especial, recordemos que no es la fecha en sí, pues este ya es otro día, nosotros somos quienes le añadimos el significado. 

Evitemos pues, engancharnos emocionalmente a las fechas, números pasados, pues este es un momento que se nos va como agua entre las manos y algún día ya no estaremos aquí para poder disfrutar de un amanecer, atardecer, ver la luna, una plática, los foquitos navideños en la calle, un abrazo... Evitemos las creencias que ensombrecen el estado de ánimo y que no nos permiten mirar lo que tenemos y lo que podemos vivir.

-Ana 



"Mirad todas las cosas compuestas de esta forma-, como estrellas, alucinaciones y lámparas vacilantes, como ilusiones, gotas de rocío y burbujas en el agua, como imágenes de sueño, relámpagos y nubes"
 -Dalai Lama en "la mente en serenidad"

Atención plena

"Sólo estamos vivos en este instante, y ahora es el único momento de que disponemos para realizar elecciones, y este ahora está siempre disponible. En realidad, todo momento es un nuevo principio".
 -Jon Kabat-Zinn
 

lunes, 7 de diciembre de 2015

Sobre la felicidad

"En cuanto a quienes pretenden que la felicidad no existe, eso demuestra que nunca fueron verdaderamente desdichados. Quienes han conocido la desdicha saben muy bien, por diferencia, que la felicidad también existe". 
- André Comte-Sponville



martes, 1 de diciembre de 2015

No luchar contra una parte de nosotros

 "Lo que vivimos nos reorganiza e inevitablemente nos cambia. Cambie un solo elemento de la historia y todo se modificará. Y nadie sabe en qué dirección. Porque si hacemos esfuerzos para no pensar en un episodio de nuestra vida, es porque reviste importancia; es decir, que ha despertado y despierta aún una emoción intensa que tratamos de acallar. Probablemente, este recuerdo continuará habitándonos mientras intentemos huir de él".

Jean-Louis Monestés en "Los secretos de los psicólogos". 

martes, 13 de octubre de 2015

Tú también puedes ser budista

Vivimos en un mundo en el que es más importante el hacer, el tener, el consumir que el ser. Al morir, no nos llevaremos nada de lo que hemos estado almacenando, tengo la esperanza de que sí podamos llevarnos nuestros aprendizajes, los momentos, los recuerdos...

Siendo así, una de las cuestiones que alimenta nuestro interior sin duda es la espiritualidad y no me refiero con ésto a ninguna religión, pues el ser humano desde que habita la tierra ha buscado el creer en algo, como una especie de refugio espiritual. Cada quien eligirá creer y profesar cierta religión o quizás ninguna, mientras nos nos vayamos al extremo o en contra del bien común por fanatismos. 

El budismo para mí, más que una religión es una filosofía de vida. Cuando las cosas van mal, una frase budista te hará sentir mejor, te provoca pensar en la relatividad de las cosas. Hace poco, me encontré en la librería con éste título: "Tú también puedes ser budista" de Dzongsar Jamyang Khyentse. Lo leí y tiene bastantes ideas interesantes para nuestra vida. Lo recomiendo.Suelo subrayar las cosas que me interesan de los libros, ésto llamó mi reflexión:

"Como los niños en el cine, estamos atrapados en la ilusión. De ahí se derivan toda nuestra vanidad, ambición e inseguridad. Nos enamoramos de las ilusiones que creamos y nos sentimos desproporcionadamente orgullosos de nuestra apariencia, de nuestras posesiones y de nuestros logros. En este sentido, es como si llevásemos una máscara y nos envaneciésemos en ella".

Este libro nos habla sobre las claves del budismo, las 4 verdades:
  • La impermamencia
  • Emoción y sufrimiento
  • La ilusión de los fenómenos
  • La iluminación
"Porque, cuando no hay ilusión, tampoco hay desilusión. Y es que cuando uno sabe que todo es transitorio, no se aferra a nada y, si no se aferra a nada, deja de pensar en términos de tener o carecer y, en consecuencia, vive plenamente".  



Me pareció un buen libro, me gustó. Se dice que uno no escoge los libros, sino que ellos te encuentran, dejémonos atrapar enotonces y alimentemos nuestra alma a través de la lectura.

"Por lo general, sólo nos damos cuenta de la mitad del ciclo de la impermanencia. Aceptamos el nacimiento pero no la muerte; aceptamos la ganancia pero no la pérdida y aceptamos que los problemas concluyan, pero no que aparezcan. La liberación se deriva de reconocer todo el ciclo sin identificarnos exclusivamente con las cosas que nos gustan". 

¿Cuantas veces no hemos creído que algo, lo que sea, "bueno" o "malo" durará para siempre? Incluida la vida misma...

"No olvidemos que la riqueza, la salud, la paz y la fama son tan impermanentes como sus opuestos. No hay en el mundo, ni en el plano físico ni en el imaginario, incluida nuestra mente, que perdure para siempre".

martes, 7 de julio de 2015

Y no te olvides de ser feliz...

... Abecedario de psicologia positiva.

Este es mi libro favorito de Christophe Andre. Y esto ya es mucho decir puesto que cada uno de ellos me parecen una obra de arte hecho libro. 
Su título es un recordatorio de lo que tan a menudo suele olvidarse. No es un libro de tres pasos para ser feliz, casualmente es un abecedario. Es un compañero al que se acude en los veranos e inviernos de la vida. Ya iré compartiendo más de el.
De los libros que forman su colección, es el más personal hasta ahora, pues en ningún otro habla tanto de el, es un libro sincero, sin pretenciones, así como podemos ser cuando se trata de la felicidad. 

Se acercan las vacaciones de verano, ¿por que no reflexionar e intentar esto?:

"Materialismo en psicologia: es el hecho de situar los valores materiales (poder, dinero, fama) por encima de los valores inmateriales (felicidad, amor, honradez). Creer que la adquisición de bienes y servicios es la mejor manera de ser feliz es evidentemente un error mayúsculo. En la carrera por la posesión y el exhibicionismo (ropa, coches, dispositivos, etc.) el materialismo empuja a lanzarse a una inútil carrera de lujos o de lo inútil, que aparta de lo que realmente podría crear la felicidad, pues todos los datos muestran asimismo que trabajar demasiado hace menos feliz. Sobre todo si se sacrifica tiempo con la familia, de amistad y de ocio para parecerse bienes materiales no indispensables. Esa intoxicación de compras inútiles e inútilmente renovadas (lo que se denomina la moda) es uno de los grandes peligros para la felicidad de los seres humanos contemporáneos. ¿Para curarse? ¡Comprar menos! ¿Para comprar menos? ¡Exponerse menos a las tentaciones! Sustituir los escaparates por paseos en la naturaleza, y el vagabundeo por los sitios de comercio electrónico, por la jardinería, la cocina, el deporta, la lectura, etcétera. Resultados garantizados en pocos meses aunque la compra y la acumulación han tomado una dimensión tal como fuentes de pequeñas alegrías en muchos de nosotros que su privación no es nada fácil, pero tampoco imposible. Sólo hay que cambiar la palabra servidumbre por abstinencia."



"Me gusta... Escuchar reírse juntas a mis hijas. Despertarme una mañana de verano y saber que no tengo nada urgente que hacer, sólo cosas importantes y lentas: comer, hablar, mirar,mandar, leer, echar la siesta. Observar a mis pacientes aliviados o curados, estar sólo y tranquilo durante varios días, sabiendo al mismo tiempo que todos aquellos a los que amo, lejos, están bien. Ver a los seres humanos ayudarse mutuamente, o reírse con ganas. Observar el amanecer, la puesta de sol, rebuscar la luna en el cielo, admirar las estrellas, olfatear el olor de la lluvia y el del buen tiempo. Saborear el frescor del valle y la belleza de la cumbre, disfrutar del esfuerzo del ascenso. Andar descalzo sobre la hierba húmeda. Sentirme todavía vivo. 

¿Y tu?..." 

Sería grato que así como Christophe señaláramos esas pequeñas felicidades que hacen de nuestros días algo consciente, sereno y enriquecedor. 


lunes, 1 de junio de 2015

Acción y meditación

Vivimos en una época complicada, en la que ante nuestra mirada atónita observamos tantos cambios: Cambios climáticos que se traducen en desastres naturales a lo largo del mundo, crímenes e injusticias en la que la gente ocasiona daño intencional sin el menor remordimiento ni compasión, guerras, hambruna, y un largo etcétera. Daños irreversibles a nuestra forma de vivir que nos hacen sentir y pensar que es el momento de hacer algo por nosotros mismos y por el mundo en el que vivimos, es momento de SER HUMANOS. 

Nos hemos creído dueños del mundo y hemos hecho con el lo que hemos querido, se nos olvida que este mundo no sólo somos nosotros, lo compartimos con otros seres como los animales, los árboles, y todo aquello que es parte de la vida misma y con los que no hemos hecho otra cosa más que destruir, matar y dañar. ¿ qué paso con la compasión? ¿Qué paso con la empatía? ¿Qué paso con nuestra humanidad, donde se nos perdió? 

Ya no es momento de reprochar o responsabilizar a otros, es momento de preguntarnos ¿yo que puedo hacer? Y hacerlo realmente, cada día, aunque parezca simple. Que esos cambios impacten en nuestra forma de vivir. 

Necesitamos cambiarnos a nosotros mismos, ahora mismo. Sirve la meditación pues es a través de ella que podemos alcanzar nuestra propia humanidad, nuestra serenidad, nuestra compasión. Y esta práctica, de la mano del hacer en pro del bien común. 

Uno de los libros que nos habla precisamente sobre como cambiar el mundo a través de la propia transformación, se llama "Acción y meditación", de la mano de cuatro escritores destacados: Christophe Andre, psiquiatra. Jon Kabat-Zinn, medico. Pierre Rabhi, labrador y filósofo. Y Matthieu Ricard, monje budista. Un libro por demás relevante del que elegiré para compartir, algunos de los párrafos o frases que más me llegaron. Cada autor ofrece datos, experiencias, reflexiones, consejos prácticos desde su punto de vista y su profesión, dirigiéndose a un fin común: Estar presentes en nuestras vidas y reconciliarnos con la naturaleza y participar en un mundo más humano. 


 
 Christophe Andre: "El materialismo entraña sufrimiento, contrariamente a lo que intenta hacernos creer una sociedad que nos incita a consumir para ser más felices". "Existe una tendencia al exceso, los paltos son demasiado grandes, y las raciones también". "Anuncios publicitarios que comparan el precio de una sesión de psicoterapia con el de diversas prendas de vestir. Evidentemente es más fácil subirse la moral gastando dinero sin pensar que pensando, a veces dolorosamente, en uno mismo". "Hay que desintoxicarnos de la tecnología: empezar a regresar a nuestra interioridad, observar lo que sucede y a partir de ahí, retomar el curso de nuestras existencias, permaneciendo conscientes y atentos a las decisiones que debemos tomar". "Cultivar la generosidad: hacer algo bueno por otro ser humano (una sonrisa, un consuelo, una donación, una ayuda, una oración), y algo por la tierra (admirarla, agradecerle, protegerla). 

Jon Kabat-Zinn: "Para explicar la importancia del momento presente me he acostumbrado a mirar mi reloj y, ante la pregunta ¿qué hora es?, responder: Vaya, es asombroso, Dios mío, ¡Sigue siendo ahora!". (Mindfulness). "En un mundo que contribuye a proyectarnos hacia afuera de nosotros mismos, la meditación mindfulness me parece una herramienta indispensable para cambiar el mundo, una herramienta de cambio para capacitarnos a fin de hacernos conscientes de quienes somos y donde situarse en medio de toda esta complejidad". "Utilizar la respiración para anclarse en el presente no es pensar, sino sentirla. Cabalgar las olas de la respiración como una hoja sobre la superficie de un estanque". "El mindfulness no es una terapia y tampoco una psicoterapia, pero es terapéutica. El autonocimiento que aporta es transformadores y sanador en sí mismo. Ahí residen la sabiduría y la compasión".

Matthieu Ricard: "Cambiar el mundo, viene a ser lo mismo, que transformarse a uno mismo, al tiempo que evita destruir, devastar el medios ambiente, explotando a los animales. Cambiarse a uno mismo es liberarse de toxinas mentales como el odio, la codicia, los celos, la venganza que envenenan nuestra existencia y la de los demás". "Si no se tiene consideración por el sufrimiento de los animales, es muy probable que no se tenga consideración por el sufrimiento de nadie. Eso significa que en nosotros se está matando una parte de empatía, de la capacidad de ponernos en el lugar del otro". 
"La compasión sin acción es estéril. Ayudar a los demás, a través de cada semana hacer actos de amabilidad y benevolencia". (Llámese animales. personas, árboles, plantas, etc).

Pierre Rabhi: "Hay una expresión que dice: 'El hombre es un lobo para el hombre', si yo fuese lobo no me gustaría que me comparasen con el ser humano, nunca ninguna especie, ha organizado el vivir juntos sobre la base de la destrucción, como hemos hecho nosotros". "Podríamos decir que es la primera vez que la humanidad depende y esta atrapada por las innovaciones que supuestamente debían liberarla: sin petróleo, electricidad, medios de comunicación, todo el andamiaje se viene abajo". "Nos sentimos mal y para intentar mejorar, consumos. El consumismo es una compensación, es una tentativa de llenar el vacío". "El cambio global sólo llegara a través del cambio humano. Si el ser humanó no cambia, nada podrá hacerlo". 

Cultiva un huerto, educa en la compasión y valores a tus hijos y lee para compartir lo que aprendes. 

Debemos recordarnos todo el tiempo que, la compasión por otro ser humano, un animal, la naturaleza, se convierte en nada si no la traducimos en acciones. Hay que comenzar, cada uno, a partir de este momento. 

viernes, 23 de enero de 2015

El valor de estar solos

Cada vez más, los seres humanos huimos de nosotros mismos, de forma deliberada nos llenamos de actividades por hacer, sonidos y un sin fin de cosas que nos provocan preguntarnos: ¿qué era lo que solíamos hacer antes de tanta tecnología?, ¿qué hacíamos con nuestro tiempo antes de tanto robó de consciencia continuo? Tanto tiempo valioso suprimido por el internet, la obsesión por las fotografías, los mensajes de celular, las redes sociales, los juegos, la televisión, etc. Pantallas casi todo el tiempo.

¿Será que nos da tanto miedo estar solos? ¿Tememos a nuestra propia voz interna? Porqué huimos de nosotros cada que podemos enfocando nos siempre en algo externo. Quizás no sea la soledad a la que se teme, sino a encontrarse desolados.




La soledad es la capacidad para estar en compañía de uno mismo, mientras que la desolación es sufrimiento por no estar acompañado y sentirse indefenso y vulnerable. Pagamos un precio muy alto por el temor a la soledad, siendo esclavos del movimiento y el bullicio que nos impiden reencontrarnos con nuestro propio ser, y esto se traduce también en dependencias, en espera de que otra persona nos venga a hacer felices, y creando expectativas excesivas, porque no sabemos estar sin el otro.

Es tan común que las personas se casen o tengan hijos no por convicción, sino porque eso dicta la sociedad para no ser excluidos o rechazados y sobre todo, para no estar solos. Se ha etiquetado la palabra soledad de tal manera que todos le rehuyen.

Para llegar a ser más conscientes de todo esto, es preciso tener el valor de enfrentarnos a estar con nosotros mismos, voluntariamente, evitando caer en el apego al otro o la entretenimiento para sentirme bien. Pequeños detalles y pequeños momentos en nuestra compañía, como si fuera un experimento, sin pantallas, sin atarnos a la interacción continúa y repetida con los demás. ¿Por que no? Salir, pasear con uno mismo, reencontrarse con ese ser genuino que habita dormido en cada uno de nosotros y hacer y decidir por convicción, no por ceder a las presiones externas, pues sí aprendemos a estar primero con nosotros mismos generaremos felicidad, estando o no acompañados.

jueves, 22 de enero de 2015

Serenidad en la vida cotiana

Serenidad: Paz, sosiego, tranquilidad, calma. ¿Es posible conseguirla en un mundo lleno de caos y sufrimiento? Christophe André nos sugiere que es posible a través de veinticinco experiencias en donde reflexiona sobre cómo obtener serenidad a pesar o en medio de. Además contiene una entrevista a Christophe en donde habla acerca de sus trabajos sobre los estados de ánimo y la serenidad.

Serenidad en la vida cotidiana es un libro pequeño que es como una especie de compendio de lecciones de las que aprender y con las que uno mismo se identifica, pues en algún momento de nuestras vidas hemos pasado por situaciones que no resultan del todo bien, frustraciones cotidianas o grandes dificultades en las que vemos nublada nuestra capacidad de mantenernos serenos. Éste psiquiatra nos demuestra una vez más, que es posible mantener nuestra paz interior, aún en aguas turbias.



"Hay días en que tu alma está serena: te sientes tranquilamente bien. Todo está claro y tranquilo en tu interior. No te falta absolutamente nada. Está presente todo aquello que necesitas. Y lo que te fascina es que "todo lo que necesitas" se limita prácticamente a nada: sentirte respirar, sentirte existir. La sensación animal, tan simple, de estar vivo. Una sensación más vasta si cabe de pertenecer al mundo. Igual que un lago tranquilo, que una montaña inmóvil, que una brisa templada. Ni siquiera necesitas decirte que la vida es bella o buena. En ese instante lo es, y tú lo sientes profundamente, sin necesidad de palabras. Es un estado global de tu cuerpo y tu mente. No es algo que suceda a menudo, desde luego, pero te dices que si pudieras sentirlo con más frecuencia, sería la mar de interesante..."

"Esos instantes de serenidad dan sentido y profundidad a nuestra vida. Nos apaciguan y regeneran".

lunes, 19 de enero de 2015

"Meditar día a día"

Las cavilaciones se refieren a dar vueltas en círculo a nuestras preocupaciones, a nuestros pensamientos una y otra vez sin llegar a una solución, y, no le encontramos sentido ya que se centran sobre preguntas que no tienen una respuesta satisfactoria ni resolutiva. Dichas preguntas son: "¿Y si...?" (Y si me enfermo, y si pasa ésto, y si no resulta lo otro, etc.) "Hubiera..." (hubiera podido hacer tal cosa, hubiera dicho lo otro.) "¿Qué pasó?" (centrarse en recordar cómo ocurrieron los hechos) y "¿Por qué?" (¿Por qué pasó ésto?, ¿por qué a mi?).

El resultado de éstas cavilaciones son frustración, y sufrimiento, porque no nos llevan a nada productivo, son cuestionamientos que generan ansiedad, el "¿y si...?" se centra en el futuro, sabemos que el futuro es incierto y que no sabremos con seguridad lo que pasará aunque nos pasemos días tratando de adivinarlo. El "hubiera" se centra en el pasado y es simplemente inútil, jamás podremos regresar al pasado para hacer modificaciones a lo que hicimos o dijimos.
El "Qué pasó" se revive una u otra vez en nuestras mentes pensando en los detalles y provocando sufrimiento, aunque la situación en sí ya no esté ocurriendo en éste preciso momento. Finalmente, el "¿Por qué?" se centra en buscar las razones o justificaciones para tal hecho, cuando en realidad no hay respuestas concretas ni explicaciones para algunos acontecimientos.

Las cavilaciones no son más que sufrmiento autoprovocado, algunas veces ni siquiera nos damos cuenta de que estamos cavilando, creemos que estamos reflexionando, pero en realidad no son verdadera reflexión, reflexionar conlleva a una búsqueda de soluciones, cuando cavilar o rumiar no nos lleva a ninguna modificación, sólo a enfermarnos emocionalmente.

Es importante identificar los momentos en los que sin darnos cuenta, estamos mentalmente caminando en círculos, y darle un respiro a nuestra mente. Éstos momentos de paz y serenidad nos los puede dar la meditación. Existen formas muy sencillas pero realmente efectivas de hacer meditación, una de esos caminos es el mindfulness, que es una práctica que tiene que ver con estar en el momento presente. Christophe André ha escrito un excelente libro que contiene 25 lecciones para vivir con mindfulness, es práctico y es muy elegante la forma tanto en la que escribe como en la que lo presenta, en cada lección describe de forma muy bonita y con mucha sensibilidad una pintura relacionada con cada tema, obras de arte de distintas galerias del mundo. Además contiene un disco con meditaciones, las cuáles están divididas en ejercicios guiados, muy prácticos de alrededor de 10 minutos cada uno. Para ser escuchados con calma, dándole a cada ejercicio de meditación su debido tiempo y que además contiene  diversas temáticas, como conectar con la respiración, consciencia del cuerpo, separarse de los propios pensamientos, emociones dolorosas, etc. Un libro de colección que vale la pena tener. A continuación unos fragmentos de éste libro:

"Al aferrarnos a los pensamientos dolorosos, al darles vueltas, los solidificamos. Le damos cuerpo e importancia. Rumiamos nuestros males y los convertimos en monstruos... Así pues, en nuestros momentos de depresión o ansiedad lo que nos hace sufrir, más allá de lo que nos sucede, son los pensamientos y creencias, a los que nos apegamos e inflexibilizamos hasta convertirlos en certidumbres. Después nos atamos como madres a esos pequeños monstruos que nosotros mismos hemos engendrado."



"A veces, a pesar de saber muy bien que nos hacemos daño, es imposible despegarse de las propias obsesiones   y cavilaciones. El mensaje del mindfulness es sencillo: si es demasiado dificil, entonces renuncio a expulsar los pensamientos dolorosos mediante la fuerza de voluntad, y lo que hago es ampliar el campo de la consciencia a todo el resto de mi experiendia del instante presente. No concedo todo el espacio mental a mis obsesiones y cavilaciones y las diluyo en un contenedor lo más amplio posible: mi consciencia ampliada al infinito".